Que la arquitectura sea fiesta

El pasado 18 de septiembre Fallece Robert Venturi a los 93 años el arquitecto estadounidense líder en el Postmodernismo, que obtuvo el premio Pritzker en 1991.

Cuando la arquitectura en los sesenta aun se arrodillaba al “menos es más“ de Mies van Der Rohe , llegó el inconformismo de Venturi y dijo que el “menos es un rollo“, en contra de lo funcional y se empeñó de que la arquitectura fuera una fiesta.

En 1992 construyó la que se considera la primera casa Postmoderna de la historia , lo que suponía romper el dogma de la vanguardia y no era un cubo acrisolado , sino una casa con un tejado a dos aguas y un rato sobra la puerta , construida a las afueras de Philadelphia para su madre.

Se empeñó en dar valor al ornamento  y a partir de ahí Venturi se convirtió en todo un referente de la arquitecta postmodernista , y no solo por eso sino también por sus estudios del pensamiento y análisis de la arquitectura  y la relación con el entorno.

Contradicción y complejidad de la arquitectura es su primer libro publicado en 1996, referente por la reivindicación del simbolismo.

Esta manera de ver la simbología y logotipos ha sido recientemente llevaba a la moda, con el título de logomanía. Y a mi parecer hacer un pequeño guiño de grandes marcas y no tan grandes a Robert Venturi.

Su investigación sobre el aspecto simbólico de la arquitectura es su legado y forma parte del pensamiento actual.

Este trabajo de investigación lo materializó escribiendo junto a su mujer Denis Scott el libro Aprendiendo de las Vegas y en el hablaban sobre la simbología del entorno y de la manera que una casa, o un cartel pueden crear una ciudad o un cartel informar a una persona.

Esta manera de ver la simbología y logotipos ha sido recientemente llevaba a la moda, con el título de logomanía. Y a mi parecer hacer un pequeño guiño de grandes marcas y no tan grandes a Robert Venturi.